Así fue la captura de alias Otoniel, máximo jefe del Clan del Golfo
En una operación conjunta entre Policía, Ejército y Fuerza Aérea, fue capturado en el Urabá antioqueño Dairo Antonio Úsuga David, alias Otoniel, el narcotraficante más buscado de Colombia.
Fuentes de Inteligencia indicaron que policías y militares adscritos a la operación Agamenón, lo capturaron en el Cerro del Yoki, paraje rural ubicado en el corregimiento El Totumo, de Necoclí.
La operación contra el máximo jefe de este grupo armado ilegal inició este viernes en la madrugada en la vereda San Pablo, de Necoclí.
Así fue la operación
Desde el pasado mes de enero, y por orden presidencial, los altos mandos militares y de Policía tuvieron que cambiar la estrategia para acercarse a Otoniel, el máximo cabecilla que había sido tan esquivo y cuya captura había fallado en tres ocasiones.
Pero el inicio de la fase final para la captura, en una operación que fue denominada Osiris, inició el pasado 15 de octubre, cuando el general Luis Fernando Navarro se reunión con los comandantes de Ejército, Policía, Fuerza Aérea y Armada nacional, en compañía de la Fiscalía y trazaron la nueva estrategia que cubría una extensa zona entre Cerro Yoki y Cerro Azul, en Necoclí. La reunión inició a las 8 de la noche en una guarnición militar en Bogotá y se extendió hasta la madrugada.
Con el visto bueno del presidente Duque y bajo una nueva fase, se hizo un primer despliegue de 150 hombres de Inteligencia que fueron desplegados en las principales ciudades del Urabá antioqueño. Fue así como a Necoclí, Turbo, Carepa y Apartadó llegaron los investigadores que empezaron a recolectar información que los llevara al jefe del Clan del Golfo.
“Una nueva estrategia para entender de mejor manera a este blanco a sus estructuras de seguridad y toda su red de apoyo Séptima división del Ejército, Fuerza Naval del Caribe, el Comando Aéreo de combate número Cinco y en estrecha colaboración con la Policía Nacional fuimos entendiendo de mejor manera los corredores de movilidad y nos ubicamos mejor en el terreno”, explicó el general Luis Fernando Navarro, comandante de las Fuerzas Militares.
Ya ubicados en el terreno con un despliegue de 500 hombres de las Fuerzas Especiales del Ejército Nacional, la Infantería de Marina bloqueando los corredores fluviales, 22 helicópteros de la Fuerza Pública apoyando, insertaron tropas en varios sitios para cerrarle el paso a los ocho anillos de seguridad con los que se movía, separados entre sí por distancias de uno a tres kilómetros.
Al componente humano se sumó la tecnología con la interceptación de comunicaciones, tarea en la que tuvieron participación funcionarios de Estados Unidos y de Reino Unido, lo que les permitió ir cerrando el cerco sobre Otoniel.
“Analizamos cada movimiento con analistas de trazas y con comunicaciones. Participaron más de 50 expertos en inteligencias de señales permanentemente sobre esa área con una cobertura exacta que nos permitía identificar los movimientos. Supimos que no llegaba a ninguna casa, dormía en condiciones de lluvia sin llegar a alguna residencia y sabíamos hasta que estaba comiendo”, expresó el general Jorge Luis Vargas, director de la Policía Nacional.
Con este resultado, el presidente Iván Duque señaló que es el más importante del siglo en Colombia en la lucha contra el narcotráfico, y lo comparo con el abatimiento de Pablo Escobar en 1993.
“Con este golpe a ‘Otoniel’, en la operación ‘Osiris’ se marca el final del Clan del Golfo, a los que han pertenecido a esta estructura criminal el mensaje es claro y contundente: o se someten a la justicia de inmediato o les caerá de la misma manera todo el peso de la ley”, expresó Duque
Juan Carlos Pinzón, embajador de Colombia en Estados Unidos, envió un mensaje de felicitación por esta captura: “Felicitaciones a nuestra Policía Nacional y Fuerzas Militares. Muchos años persiguiendo a este individuo que tanto mal ha hecho al país. Desde el 2015 iniciamos operación Agamenón”.
Por Otoniel, el gobierno colombiano ofrecía una recompensa de 3 mil millones de pesos y EE. UU. cinco millones de dólares.
EL COLOMBIANO